Circe y Circos

Sirenas

Una mujer con portaligas
terminaría el partido en esa jugada.
Sin embargo se acomoda
mezquinando el apuro
reza  tu ego
danza  tu espina
y susurra
tus estrellas exitadas.

El tiempo va en sus caderas.
La suerte, escondida en cintura
que se ofrece
a ser domada.
Sólo entonces sube a tus sueños
para arrancarte el paraíso
el exilio
y el amor.

Una mujer en portaligas
lleva un plan;
y si quiere
apaga todos tus cielos.